Esta es una invitación a vivir el
mundo de la lectura. Visita la biblioteca de tu colegio.
La Biblioteca Sobrevive
Por Natalia Rico
Docente lengua castellana
La biblioteca, como lo plantea Borges, es un inmenso laberinto;
contempla un universo de posibilidades
donde se construyen diferentes tipos
de lectores. Lectores ansiosos, lectores
espontáneos, lectores consumados. Esto
significa que la biblioteca propone diferentes caminos de exploración,
diversas aventuras de iniciación a la lectura o de encuentro litúrgico con
ella; es decir, que el o los lectores pueden a través de ésta sumergirse en
otras realidades. Además, es un espacio que va mas allá de las repisas y las
enciclopedias; es un sitio sagrado que convoca al silencio para atrapar al
genio de la inspiración y la reflexión.
Por lo tanto, la
biblioteca es un laberinto; propone una expedición hacia lo desconocido y
plantea nuevos retos hacia lo conocido. Detrás de la lectura de cada libro se
evidencia un esfuerzo hacia el entendimiento de diversos presupuestos. La
lectura se asemeja a un trabajo minucioso y concienzudo; a una actividad de
recolección de pistas y búsqueda de evidencias que conduzcan a un fin. En esta
labor el lector aprende a escuchar la melodía que oculta cada página de un
“muerto” y por consiguiente esta en la capacidad de vivir con la presencia del próximo resucitado.
A
través de la historia la biblioteca se ha configurado de distintas
maneras, dependiendo de las necesidades
y transformaciones de la sociedad. No obstante, permanece en ella el rigor del conocimiento y la continua
evocación al silencio. Desde sus inicios la biblioteca es el lugar donde el
hombre ha experimentado la necesidad de agrupar, conservar o reproducir todo
aquello que le sirva de apoyo a su
pensamiento. El antecedente que se me ocurre para afirmarlo, es la biblioteca
construida en la antigua ciudad de Alejandría bajo el gobierno de Alejandro
Magno, quien estimulaba la búsqueda de conocimientos sin despreciar las
diferentes culturas; por tal motivo consideró necesario conservar viva la memoria de los pueblos como un legado para
la humanidad; la biblioteca se erigió como el centro del conocimiento y
posibilitó la construcción de un ambiente propicio para la gestación de
ideas y en la actualidad se puede afirmar que mantiene la fama. Ahora bien, la
biblioteca quiere seguir dinámica en la
conciencia del ser humano, por eso ha hecho uso de la tecnología para brindar
mejores posibilidades de acceso a los recursos que tiene.
Este lugar no sólo mantiene el letrero del “haga silencio”, que parece ser el llamado para la creación, sino
que también conserva el significado para el cual fue construida, aunque su
recorrido histórico la haya obligado a asimilar diferentes sistemas con el fin
de no quedar relegada u olvidada.
Algunos opinan que la biblioteca esta
en riesgo, al igual que el libro su vía
mas próxima es la extinción, pues se suele pensar que las nuevas tecnologías
han reemplazado o en un futuro desterraran por completo estas invenciones del
pensamiento humano. En ocasiones es
profanada, sin embargo mantiene vigencia, sólo que sus funciones se han
modificado dependiendo de las épocas y el uso para que el se les destine;
pero la biblioteca resiste, pues ella
promueve más que la acumulación de conocimientos, la capacidad de construir
sociedades. Al igual que en el campo de la enseñanza, la revolución tecnológica
se ha canalizado para optimizar los procesos de enseñanza-aprendizaje, la
biblioteca se vale de estos recursos a fin de ampliar su campo de acción,
posibilitando así el marco de la investigación o la información a todo tipo de personas.
En conclusión Defiendo la idea de que la biblioteca seguirá en su
lucha, sobreviviendo, adaptándose a los cambios y auque la inserción de la
tecnología es un suceso inevitable en cualquier ámbito, esto no significa que
se desplace el papel de ciertos elementos fundacionales de una sociedad, como es el caso de la
biblioteca, el libro o los maestros.