miércoles, 26 de marzo de 2014

Para el periódico NUEVAS VOCES DE ESPERANZA

ELECCIONES PARLAMENTARIAS EN COLOMBIA

Las elecciones en todo el país, del pasado 9 de  marzo que eligió un nuevo Congreso de la República para el periodo 2014-2018, en la cual como estaba previsto, no eran muchas las esperanzas renovadoras, no solo por lo que en los últimos días han dado por llamar la “mermelada”, que no es otra cosa que, una larga lista de prebendas, contratos, puestos y compromisos “non santos”, entre el gobierno nacional y los partidos y movimientos que conforman la también llamada “Unidad Nacional”, no para gobernar de acuerdo al interés nacional sino, para garantizar no solo la reelección del Presidente Santos sino también todo el programa neoliberal de desarrollo económico y social que con los TLC; Reformas Tributarias, Laborales y Pensionales; Privatizaciones; la entrega de  los recursos naturales atreves de concesiones leoninas, en las mal llamadas locomotoras mineras, energéticas, de transporte, entre otras, política neoliberal que por ya más de 2 décadas ha desangrado a Colombia junto a la entrega del mercado y la mano de obra nacional a multinacionales y potencias económicas extranjeras, estas que realidad son viejas lacras aumentadas por la violencia y la guerra interna que ha desangrado a Colombia por más 50 años, dejando a su paso una  estela de víctimas, entre muertos y desplazados; despojo de tierras, inmuebles, muebles y enseres que en su gran mayoría han ido a parar a manos de los nuevos terratenientes con vínculos narco paramilitar y a manos de multinacionales que en complicidad con algunas  autoridades nacionales, regionales y locales ( ministros, directores de departamentos descentralizados, notarios, registradores, alcaldes, empresarios, etc.) han logrado “legalizar”, incluidas las miles y miles de hectáreas de reserva natural.
Los Parlamentarios que el Centro democrático – de democrático no tiene nada- sumados a los que el partido de La U., el partido Conservador, Cambio Radical, El PIN y no pocos del partido Liberal fueron elegidos, hacen una amplia mayoría que a todas luces van a refrendar una legislatura de corrupción, entrega de la soberanía alimentaria, quiebra de la industria nacional; refrendarán unos renglones de la economía propios de la conquista y la colonia como es la minería, la ganadería extensiva, el cultivo de palma africana, caña de azúcar, caucho sin mayor valor agregado; refrendarán la entrada legal e ilegal de todo tipo de mercancías de mala calidad y sin la intervención de mano de obra colombiana, bien paga.
Son muy pocos los Senadores y Representantes que las fuerzas de Izquierda Democrática y de otras corrientes democráticas  fueron electos con el voto popular, con el voto de opinión libre de toda clase de chantajes y presiones; sin embargo hay la certeza de que, estos representantes del querer nacional libraran la batalla, la lucha parlamentaria tan vigente y de gran alcance como la movilización, la protesta en las calles y campos de Colombia.
El voto en blanco, un opción política tan inútil como equivocada, que al igual que la abstención, no resiste mayor análisis, porque no requiere de ningún esfuerzo, puesto que  por simplista y facilista fue impulsada por el gobierno y sectores retardatarios que ven  amenazados sus particulares intereses en las contiendas electorales, donde fluyen votantes con algún grado conciencia sobre los males que nos aquejan  y las transformaciones que requiere nuestra Patria humillada y maltratada.
Aunque el panorama es desalentador, hay alguna esperanza frente a las negociaciones que se llevan a cabo en la Habana, Cuba, que pongan fin al conflicto armado, puesto que la unidad nacional de Santos en este asunto, está de acuerdo, solo que la extrema derecha va a ir al congreso a torpedearlo, son señores y señoras de la guerra, viven de ella, corrompen todo lo que alrededor ella se mueve, no van dejar de asustarnos con el coco de las farc., claro está que se requiere de la voluntad política de esta y que de una vez por todas reconozcan que han estado equivocadas con la combinación de todas las formas de lucha, cuyas primeras víctimas es la población civil más necesitada de las regiones. En este punto los Parlamentarios de las fuerzas Democráticas sí que van a tener que batirse, ojalá lo hagan de la mejor manera por la Democracia, el desarrollo, el progreso y el bienestar de toda Colombia; la lucha es sin cuartel y se debe dar desde todos los escenarios para que el presente y futuro  nos pertenezca.

Orlando Ardila
Almacenista

Colegio Nueva Esperanza.